miércoles, 17 de octubre de 2018


                                                       DESDE LAS PLEYADES



Desde el bullicio del pensar, sentir, desear, temer, no se presentará la contemplación. El equivalente del ruido externo es el ruido interno del pensamiento. El equivalente del silencio externo es la quietud interna. Cada cual es responsable de alcanzar y emitir en su propio tono. En todas las situaciones del vivir se puede contemplar. Para contemplar hay que reposar y dejarse arropar por el verdadero silencio. Vaciarse con la mente es llenarse más con la mente. Meditar es un vacío de mente, cuerpo, emoción y existencia condicionada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario